No estás siendo olvidado, estás siendo reservado para algo más grande

No estás siendo olvidado, estás siendo reservado para algo más grande

Hay momentos en la vida en los que sentimos que hemos sido puestos en pausa. Nada avanza, los mensajes no llegan, las puertas no se abren, y todo lo que soñábamos parece más lejos que nunca. En esos instantes, la mente nos engaña: “Te están olvidando”, “no eres suficiente”, “ya no importas”.

Pero he aprendido, a través del silencio y la espera, que no todo lo que parece un vacío es una pérdida. A veces, la vida te reserva. Te aparta. Te guarda. No porque te haya olvidado, sino porque está preparando algo que no puedes entender todavía. Algo que requiere una versión de ti más fuerte, más sabia, más consciente.

Sé cómo se siente mirar el teléfono y no ver respuestas. Sé lo que es esperar una oportunidad que no llega. Sé lo que es ver cómo otros avanzan mientras tú solo intentas no rendirte.
Lo sé, porque lo viví. Y porque lo vivo.

En esos días, me pregunté mil veces si estaba haciendo algo mal, si me había desviado, si estaba perdiendo mi tiempo. Pero con el paso del tiempo comprendí algo que me cambió la mirada: el silencio no siempre es castigo. A veces, es preparación.

Lo que no se ve también importa. Hay raíces creciendo debajo de la tierra antes de que aparezca la primera hoja. Hay corazones sanando en silencio, almas reconstruyéndose en lo profundo, sin testigos. Y todo eso es parte del proceso.

No estás siendo olvidado. Estás siendo pulido. Estás siendo refinado. Estás siendo llevado a un lugar más alto, pero primero tienes que vaciarte de lo que ya no necesitas.

La pausa no es señal de abandono. Es una forma de cuidado. La vida no te deja en espera para castigarte. Lo hace para proteger lo que estás por recibir. Porque a veces, si te entregara lo que pides antes de tiempo, no sabrías sostenerlo.

Hay un momento exacto para cada cosa. Y aunque te duela la espera, esa espera está cargada de propósito. Aprender a confiar en lo que no entiendes es una forma superior de sabiduría. Y aunque no puedas verlo hoy, un día mirarás atrás y dirás: “Ahora lo entiendo. Ahora veo por qué no era antes”.

La vida no se olvidó de ti. Al contrario, te está protegiendo de lo que todavía no sabes manejar y preparándote para lo que está por venir.

No confundas la pausa con el abandono. No confundas el silencio con desinterés. No confundas la soledad con castigo. Tal vez, en este mismo momento, algo se está alineando en tu favor sin que lo sepas.

Tú sigues aquí. No porque no te haya pasado nada, sino porque lo que te está pasando por dentro aún no se ha manifestado afuera. Pero lo hará. Lo hará en su momento, cuando estés listo, cuando todo encaje, cuando tus manos puedan sostener lo que tu alma ha estado esperando.

Así que no te desesperes. No te compares. No te sueltes. Porque no estás siendo olvidado…
Estás siendo reservado para algo mucho más grande de lo que imaginas.

Gracias por tomarte este tiempo para ti. Gracias por detenerte en medio del ruido y leer algo que no busca likes, sino verdades. Si este mensaje habló a tu corazón, compártelo. Alguien más puede estar sintiéndose igual que tú. Y si algún día vuelves aquí, recuerda que este espacio existe para abrazarte con palabras.

Marlon Zometa

Hola, soy Marlon Zometa, Blogger y Creador de Contenido apasionado por inspirar, conectar y transformar vidas a través de mensajes auténticos y reflexiones profundas. En este espacio comparto contenido único diseñado para motivarte y ayudarte a ver la vida desde nuevas perspectivas. Conecta conmigo: facebook instagram twitter youtube tiktok pinterest external-link external-link

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente